En las últimas semanas se han publicado distintas noticias sobre los resultados del Informe PISA. En este artículo se resumen las principales conclusiones, analizando la situación de la educación en España, comparada con otros países de la UE y de la OCDE, y si existen diferencias significativas entre las distintas comunidades autónomas.
El estudio PISA (o Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes) es un estudio trienal promovido por la OCDE y que lleva realizándose desde el año 2000. En este estudio se analiza el nivel de conocimientos adquiridos al terminar la ESO y hasta qué punto se sabe cómo aplicarlos. Participan 37 países de la OCDE y otros 43 países asociados.
Para la realización de este estudio en España han participado 966 centros educativos (públicos, privados y concertados), tomando parte 30.800 estudiantes de edades entre 15 y 16 años (en su mayoría de 4º de la ESO) y con representación de todas las comunidades autónomas, Ceuta y Melilla. Consta de una prueba de una hora con distintas preguntas, y una vez acabada la prueba cognitiva se pregunta sobre el contexto familiar, económico y escolar.
Principales Resultados
En una escala de 600 puntos, España obtiene una media de 473 de rendimiento en matemáticas, situándose en la media de la OCDE con la 23ª posición en un ranquin que lidera Japón. En rendimiento en lectura, España obtiene un 474 (por debajo de la media de la OCDE y de la de la UE), situándonos en la posición 24ª en la lista liderada por Irlanda. En rendimiento en ciencias la nota media alcanzada es un 485 (en la media OCDE) y la posición la 25ª; en esta categoría también Japón es el líder.
Foto: Informe PISA 2022
La pandemia, el confinamiento y las clases online han incidido claramente en los resultados, suponiendo una caída del nivel de conocimiento matemático en todos los países.
Los resultados en competencia matemática son muy distintos entre las CC.AA., estando nueve de ellas por encima de la media de la UE y de la media española. Las tres mejores son Castilla y León, Asturias y Cantabria.
Foto: Informe PISA 2022
Según este informe, un factor muy importante para determinar la calidad de la educación de un país no es solo la nota media alcanzada, sino la equidad. Esta se valora como el grado de igualdad entre los alumnos. Así, se obtendrán un mayor valor cuando haya más alumnos con resultados similares, y peores cuando haya grandes diferencias entre los mejores y los peores alumnos. En esta métrica España se sitúa en una posición relativamente mala, por debajo del promedio OCDE y en la posición 35ª.
Los resultados de competencia lectora también muestran grandes diferencias por comunidades autónomas. Castilla León, Asturias y Madrid obtienen los mejores resultados. Destacando que hay diez Comunidades que están por debajo de la media de la OCDE.
En resumen la situación educativa media en España es similar a la de otros países de su entorno, con alguna debilidad en capacidad lectora. Como en el resto de los países, la pandemia supuso un duro golpe para los resultados de rendimiento educativo.
La calidad de la educación es calidad si es para todos. PISA considera que un sistema es equitativo si consigue que el rendimiento dependa de las capacidades, y no del contexto de cada uno. Por lo que es importante entender las variables que afectan a las puntuaciones obtenidas en las distintas competencias.
Si analizamos las variables que pueden tener impacto en los resultados, viendo si hay diferencias de resultados por género, inmigración, tipo de centro (público o privado) o el estatus económico-social (ISEC)La educación en España no discrimina por géneros más que la media comunitaria, al igual que en la mayoría de los países los resultados de las mujeres en lectura son mejores, en matemáticas son los hombres quienes obtienen mejores resultados y en ciencias son iguales. Y la desigualdad está en la media. Destacando que en algunas comunidades autónomas no hay diferencias en resultados en matemáticas entre chicos y chicas
Y pese a tener un porcentaje elevado de estudiantes inmigrantes (15%) cifra superior a la media europea la diferencia de resultados entre inmigrantes (aquellos estudiantes cuyos dos padres no sean de origen español) y nativos (cuando al menos un progenitor ha nacido en el país) es menos acusada que la media de la UE. España se sitúa en la posición 22ª de desigualdad (mejor que la media de la UE).
Si analizamos por comunidades autónomas las que mayor % de estudiantes inmigrantes son, Melilla (26%), Cataluña (24%) y Baleares (21%). Pero es en en el País Vasco, Asturias y Aragón donde las diferencias de resultados entre nativos e inmigrantes son más acusadas.
Uno de los mayores problemas de España es la desigualdad de resultados entre centros privados y públicos. Se distinguen centros de titularidad pública y privada (que incluiría los totalmente privados y los concertados). España se sitúa en la posición 30ª de desigualdad público-privada, cifra muy superior a la media de la UE y de la OCDE. Estas desigualdades público-privada están por encima de la media de la UE en nueve comunidades autónomas. En la media de países, los resultados son mejores en los centros privados que en los públicos, aunque en Rumania, Japón, Italia o Polonia los rendimientos son significativamente más altos en los centros públicos. Destaca el alto % de estudiantes matriculados en centros privados en España que es del 69%, mientras que la media de la UE es de 85%.
El estatus de la familia del estudiante medido con el ISEC (Índice Sociocultural y Económico) tiene impacto en el rendimiento académico en mayor o menor grado. En el caso de España hay 86 puntos de diferencia de resultados entre favorecidos y desfavorecidos económicamente, que nos sitúa en la posición 19ª y por debajo de la media comunitaria y de la OCDE. Cantabria es la comunidad autónoma donde las diferencias de rendimiento por situación social favorable son menores, y Cataluña es donde las diferencias se hacen más visibles.
Habitualmente hay una relación entre estatus económico y estudios en un centro privado, pero esto no ocurre en España, lo que nos indica que esta diferencia es mucho más atribuible a la titularidad del centro que a los condicionantes socioeconómicos del alumno.
Otro problema en España son las acusadas diferencias entre comunidades autónomas. Aunque el país a nivel medio tiene una posición relativamente buena, hay grandes disparidades de resultados en matemáticas, lectura y ciencias, así como aspectos más ligados a criterios de poca equidad en las posibilidades educativas, donde destaca el País Vasco por su mayor diferencia de resultados entre inmigrantes y no inmigrantes, y Cataluña por sus diferencias entre estudiantes de clases más y menos privilegiadas. PISA nos muestra también que un buen sistema educativo y unos buenos y equitativos resultados no dependen exclusivamente de una mejor situación económica del país.
