Sobre las 10:15 horas del pasado 4 de septiembre, una dotación de la Unidad de Seguridad Integral (USEI) de la Policía Local de Palma se personó en un bar de la barriada del Rafal Vell, donde se había refugiado una mujer tras haber sido avisada desde la guardería de su hija de que su expareja, un ciudadano tunecino de 44 años, del cual tiene una Orden de Protección, había acudido a recoger a la menor. Por temor a encontrarse con él, se refugió en un bar hasta la llegada de la policía.
Tras realizar una batida por la zona, los agentes no consiguieron localizar al autor e indicaron a la mujer el procedimiento a seguir para denunciar los hechos. Una vez asegurada la integridad de la víctima, los agentes acudieron a las dependencias policiales y, mientras confeccionaban el correspondiente informe, recibieron la notificación de que un individuo que correspondía exactamente con los datos venía a preguntar por los términos restrictivos de su Orden de Protección.
Tras ser identificado y comprobar que se trataba del varón anteriormente buscado, se le comunicó su detención por un presunto delito de quebrantamiento de medida cautelar. Una vez puesto a disposición judicial quedó en libertad con cargos.
Aunque la víctima no interpuso denuncia, la valoración del riesgo realizada por la Unidad de Protección Familiar (UPFA) dio un resultado medio, por lo que se adoptaron las medidas oportunas para su protección.