Estados Unidos está utilizando a Ucrania para desgastar a Rusia en una guerra larga cuyo final está todavía muy lejos. Durante todo el conflicto ambos bandos han vendido pequeñas victorias tácticas como grandes batallas decisivas, una estrategia propagandística propia de la Primera Guerra Mundial.
Rusia aseguró que después de la caída de Avdiivka su avance sería poco menos que un paseo, pero esta perorata nos suena familiar ya que también dijeron lo mismo con la acería de Azov o cuando empezó el reclutamiento de reservistas. La realidad es que tanto Azov como Avdiivka no son más que pequeños pasos hacia una victoria todavía muy lejana.
Ucrania sigue perdiendo posiciones y retrocediendo, y esto se debe a una sencilla razón, y es que su mayor aliado, Europa, no tiene suficiente armamento ni para armarse a sí mismo. Las mayores potencias militares de Europa cuentan con un almacén de municiones que en el caso de entrar en guerra con Rusia apenas durarían semanas antes de quedar vacías.
Pero este no es el único problema que tiene Ucrania, ya que en los altos mandos políticos y militares existe una fuerte corrupción estructural. Ésta hace que gran parte del armamento y los fondos que llegan del oeste, acabe en manos de mafiosos y oligarcas, y estos a su vez en redes de tráfico internacionales.
#Russia / #Ukraine 🇷🇺🇺🇦: #Ukrainian Forces arrested illegal arms dealers and captured various weapons in #Zhytomyr.
AK-12 & AK-74M rifles (trophy from #Russian Forces), RPO-A Shmel thermobaric rocket launcher, RPG-22 rocket launcher, OF37 grenade (from #France 🇫🇷), F-1/RGD-5… pic.twitter.com/E9khFeUm8b
— War Noir (@war_noir) April 26, 2024
Ucrania acaba de aprobar una ley de reclutamiento que tendrá efecto en septiembre de 2025 y que tendrá como objetivo formar militarmente a todas las personas entre 18 y 60 años. Esto puede suponer un avance pero implica también sacar a soldados capacitados del frente para formar durante varios meses a los nuevos reclutas.
Parece que Rusia tiene todas las de ganar pero no todo está perdido para el bando ucraniano. Rusia tomó Avdiivka hace más de un mes y durante este tiempo ha penetrado 10km la línea defensiva ucraniana. Esto en términos generales parece una miseria pero teniendo en cuenta el desarrollo de este conflicto es bastante significativo. El siguiente objetivo es la localidad de Pokrovsk, a la cuál podrían llegar en septiembre si consiguen mantener este ritmo, aunque es poco probable ya que el ejército irá perdiendo fuelle.
Si Rusia juega sus cartas correctamente puede aprovechar la actual debilidad ucraniana y lanzar una buena ofensiva desde finales de mayo hasta principios de octubre. Aprovechando el verano y el buen tiempo, y haciendo uso de su infantería mecanizada les daría tiempo a encadenar el final de la ofensiva con las elecciones presidenciales estadounidenses, que serían el 5 de noviembre de este año.
En Europa se respira un aire tenso, varios dirigentes militares europeos han hecho declaraciones dejando caer que el continente ya está en guerra y que nos preparemos para el enfrentamiento directo. En enero de este año el ministro de defensa civil de Suecia declaró que su país debería prepararse para una guerra lo antes posible. Michael Bayden, jefe del estado mayor sueco en materia de defensa, alegó que “la guerra de Rusia en Ucrania era solo una etapa, no el fin de la partida”. Ya no hablamos de políticos populistas que pretenden movilizar un voto concreto, algo se está gestando en Europa y solo el tiempo nos lo mostrará.