En la madrugada del jueves, agentes de la Policía Local de Palma acudieron a una calle próxima a la plaza Francesc Garcia i Orell de Pere Garau (Mallorca) advertidos de que un hombre y una mujer se encontraban heridos tras agredirse mutuamente.
Una vez en el lugar, los agentes pudieron comprobar que ambos individuos presentaban claros signos de violencia en la cara. El hombre sangraba abundantemente a causa de un corte en los labios y la mujer se encontraba refugiada en un portal con múltiples hematomas en el rostro. Tras controlar la situación, solicitaron la presencia urgente de personal sanitario.
Más tarde, la mujer, de nacionalidad cubana y 42 años de edad, manifestó que un individuo desconocido la había introducido por la fuerza en un rellano y había comenzado a golpearla. Ante tal situación, admitió que se defendió como pudo hasta que consiguió zafarse y escapar. Tras esta declaración, no quiso contar nada más a los agentes. Los policías insistieron sobre los restos de una botella rota que había en el suelo, compatibles con las lesiones observadas en el rostro del varón. Sin embargo, la mujer mantuvo su decisión de no querer hablar más acerca de lo sucedido.
El hombre, de nacionalidad rumana y de 39 años, se expresaba de manera incoherente e inconexa, por lo que no pudieron tomarle declaración. Ante la gravedad de los hechos, se les comunicó su detención por sendos presuntos delitos de lesiones. Además, se investiga también al varón por un delito de coacciones.
Los servicios sanitarios trasladaron a ambos al centro hospitalario de Son Espases, en Palma, custodiados en todo momento por agentes de la Policía Local.
Tras las diligencias iniciadas por División de Policía Judicial (DPJ), los detenidos, juntamente con el atestado, fueron traspasados a Policía Nacional.
