El grupo político flamenco Vlaams Belang ha criticado con firmeza la elección de una mezquita como sede para una jornada de contratación dirigida al personal penitenciario. Según declaraciones de su portavoz, Van Lommel, las autoridades “no pueden organizar un evento así en una mezquita”, señalando que existen suficientes espacios públicos o gubernamentales neutrales para tales iniciativas .
El portavoz subraya que, aunque el 43 % de la población de Turnhout no es de origen belga, “no es razón para utilizar una mezquita” como lugar de reclutamiento, ya que, en su opinión, se está violando la separación entre iglesia y Estado.
Además, advirtió que esta decisión podría tener un efecto negativo: “esto no atraerá gente, sino que alejará a candidatos que contemplan trabajar en la prisión de Merksplas”. En tono irónico, comentó que la ministra Verlinden debería acudir “con una taza de té bereber”, siempre y cuando se le permita conservar sus zapatos en el interior (vlaamsbelang.org).
Las «jobdagen», jornadas de empleo, buscan captar candidatos para cubrir vacantes en el sistema penitenciario, una práctica habitual en varias regiones, también en entornos laicos como centros culturales o instalaciones públicas.