La Policía Nacional ha desarticulado el «Coro TJ Green» de los Trinitarios, asentado en Torrejón de Ardoz y operando en la Comunidad de Madrid. Ocho personas han sido detenidas, entre ellas el «Corona Suprema» y siete altos cargos de la organización, a quienes se les imputan delitos de asesinato, pertenencia a organización criminal, tenencia ilícita de armas y tráfico de drogas.
La investigación comenzó el 13 de mayo tras un tiroteo en el exterior de una discoteca en Puente de Vallecas. Varios hombres armados dispararon contra un grupo de personas, dejando a un hombre gravemente herido. Las pesquisas determinaron que fue el líder territorial de los Trinitarios quien ordenó el ataque como ajuste de cuentas por una deuda de drogas.
Más tarde, los agentes localizaron un piso franco en Torrejón de Ardoz desde donde el «Corona Suprema» dirigía las operaciones. El 19 de junio, la Policía Nacional registró el inmueble y detuvo a cuatro individuos, incluyendo la «tercera cabeza» o «jefe de guerra», responsable de planificar ataques violentos. Se incautaron cinco armas de fuego, munición, drogas y documentación interna de la banda.
Finalmente, el 19 de diciembre, los agentes detuvieron a los dos autores materiales del tiroteo, miembros de los Trinitarios con rango de «soldados». Ambos pasaron a disposición judicial y se decretó su entrada en prisión.
El líder de la banda huyó al extranjero tras el ataque, pero regresó a España en Navidad, quedando detenido de nuevo el 14 de enero tras una nueva agresión con arma de fuego en Villa de Vallecas. Además, los agentes arrestaron también a su pareja sentimental, que había facilitado su fuga, un día después.
La operación, que duró casi un año, ha culminado con la detención de seis adultos y dos menores, todos de nacionalidad española y origen dominicano. Seis de ellos están en prisión preventiva y uno de los menores se encuentra en un centro de internamiento.
