Las Islas Canarias se han convertido en un enclave político esencial para la recepción de inmigración en España, tanto de forma legal como ilegal. Durante la pasada Conferencia de Presidentes el presidente canario, Fernando Clavijo, aseguró que tuvo una charla con los miembros del gobierno, a los que aseguró haber dicho que «tenemos la obligación de dar una respuesta a este fenómeno como país. Eso es lo que pedí, eso es lo que exigí», en clara referencia a la situación que se vive en Canarias con la inmigración desde hace años. En esta misma comparecencia Clavijo anunció que esta semana se celebrará una reunión con los ministros del Interior, Política Territorial y Migraciones, Fernando Grande-Marlaska, Ángel Víctor Torres y Elma Saiz, respectivamente. El objetivo de esta reunión es «intentar trazar y coordinar» la distribución de todos los inmigrantes que lleguen a las costas canarias.

La tensión entre el gobierno autonómico, el gobierno y el resto de comunidades autónomas viene siendo un tema de debate político durante muchos meses atrás. Frente a la insistencia del gobierno canario como abordar la situación ha sido debatida en numerosas ocasiones, no llegando a buen puerto en ninguna de las mismas.

Canarias es uno delos puntos estratégicos más importantes de viaje de los inmigrantes hacia Europa. Numerosos organismos avisan que esta ruta es utilizada por las mafias para el tráfico de personas, ayudados en ocasiones por las propias ONG que tienen una gran complicidad con las mismas. Hace unos escasos días la policía mauritana anunció que había desmantelado una red de tráfico de personas inmigrantes en situación administrativa irregular hacia Canarias, arrestando en el proceso a cuatro de sus miembros. A través de un comunicado la brigada de la Oficina Central de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Migrantes y la Trata de Personas afirmaba que había desmantelado una red de tráfico de inmigrantes hacia Europa. Pese a no especificar que ruta se seguía para la entrada de esos inmigrantes se sabe que la ruta canaria era la elegida para poder hacer estos transportes. En el comunicado la policía también aseguraba que confiscaron «recibos por el pago de importantes cantidades de dinero por parte de las víctimas de la migración ilegal a la red de tráfico a cambio de facilitar su tránsito a través de Mauritania hacia Europa».

A finales de mayo el Ministerio del Interior publicó los datos de las llegadas de inmigrantes a las islas. La cifra oficial entre el 1 de enero y el 15 de abril nos dice que han llegado al país 13.000 personas, lo que representa una caída del 24% respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, las cifras del año pasado supusieron un récord en cuanto a llegadas, siendo las Canarias la vía principal de entrada de los mismos. Por lo tanto, esta ruta sigue siendo una de las más utilizadas por las mafias para introducir inmigración en nuestro país. Las medidas tomadas hasta el momento por parte de la comunidad y del gobierno no están dirigidas a frenar la ruta, sino a repartir a los inmigrantes que sigan legando a las Islas Canarias, cada día más afectadas por estas oleadas migratorias que carecen de control alguno.