El contrato para suministrar comidas y bocadillos en el comedor municipal de la calle La Panera de Lleida se adjudicó el 20 de enero a la cooperativa Lleure Qualia SCCL por 54.670 euros, IVA incluido. Este servicio se prestará durante un trimestre. Según el pliego de condiciones, se especifica que los menús no deben contener carne de cerdo y que la carne utilizada debe provenir de establecimientos con certificado Halal.
El pliego establece que los bocadillos se deben confeccionar con media barra de pan de 250 gramos y que los embutidos no pueden ser de cerdo ni sus derivados. También se permite el uso de queso o atún.
El certificado Halal asegura que la carne cumple con los requisitos de la ley islámica para el consumo. Esto implica que el animal debe seguir una dieta vegetariana, libre de hormonas y ser sacrificado de acuerdo con el rito islámico, mediante una incisión profunda en el cuello mientras se menciona el nombre de Alá. Además, se excluyen productos como el cerdo, sangre y otros derivados de animales no sacrificados según la ley islámica, así como el alcohol y ciertos aditivos.
Consultado por el diario Segre, el Ayuntamiento de Lleida explicó que el pliego tiene en cuenta la diversidad cultural y social de los usuarios del comedor. Esta práctica, según el Ayuntamiento, es común en Cataluña. La licitación también contempla requisitos adicionales para garantizar que el servicio se ajuste a las necesidades diversas de los usuarios.