El viernes 10 de enero, tras una inspección académica, la prefecta de Auvernia-Ródano-Alpes anunció la rescisión de los contratos de asociación entre el grupo escolar musulmán Al-Kindi y la República Francesa. Este centro educativo está dedicado a la enseñanza media y secundaria. Según el comunicado oficial, se detectaron fallos graves, disfunciones administrativas y falta de transparencia en la gestión y financiación. También se denunció el uso indebido de fondos públicos para clases no autorizadas.
Además, la escuela fue acusada de incluir contenido religioso en la educación obligatoria. También se señaló la aplicación de normas internas discriminatorias hacia las niñas, como prohibir el maquillaje o ciertas prendas de vestir consideradas inapropiadas. La prefectura concluyó que estas prácticas eran incompatibles con los valores fundamentales de la República Francesa. Uno de los motivos más graves para la rescisión del contrato fue la supuesta cercanía entre Al-Kindi y la Hermandad Musulmana. La inspección encontró dos libros islamistas en el Centro de Documentación e Información. Asimismo, un profesor del colegio hizo declaraciones polémicas en su canal de YouTube, apoyando a imanes expulsados de Francia por radicalismo.
El 10 de enero de 2025, la Prefectura del Ródano confirmó la decisión de cesar las subvenciones públicas al grupo escolar Al-Kindi, ubicado en Décines-Charpieu, cerca de Lyon. Más de 600 estudiantes asisten al establecimiento. La prefectura citó «incumplimientos graves», como materiales y declaraciones de docentes contrarios a los valores republicanos, tras varias inspecciones.
Al-Kindi anunció que llevará el caso a un tribunal administrativo. Este grupo escolar cuenta con 22 clases, de las cuales el 80% están bajo contrato estatal. De los 79 empleados, 36 son pagados por el Ministerio de Educación Nacional. Además, el 50% del presupuesto del colegio depende de la financiación pública.