Las limpiadoras de la UPV han escrito un comunicado manifestando su hartazgo ante los actos de protesta y las amenazas que han recibido por parte de las feministas. Como cada 8 de marzo, las presuntas adalides de la liberación de la mujer trabajadora, realizan actos vandálicos en las universidades afectando directamente al personal de limpieza, formado mayoritariamente por mujeres. Este es el caso del alumnado GUNEA, un «espacio de interlocución colaborativa entre el movimiento feminista y la Diputación Foral de Guipúzcoa».
Los actos citados van desde la ruptura del mobiliario dificultando que el resto del alumnado pueda usarlo, a pintadas. Las formas de protesta de las feministas no solo suponen un trabajo extra para el personal, éste se ve obligado a estar expuesto a productos altamente tóxicos para poder quitar la pintura día a día, perjudicando también a su salud.
Las trabajadoras además han tenido que lidiar con amenazas, insultos y el trato condescendiente por parte del alumnado de GUNEA cada vez que se le intentaba recriminar los actos. Por ello, la plantilla condena enérgicamente las faltas de respeto y no va a permitir que los integrantes de este espacio intenten generar miedo, tensión o estrés que supongan trabajar en estas condiciones.