La Guardia Civil detuvo ayer en Córdoba a un hombre acusado de delitos de terrorismo. La operación se desarrolló bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción número 4 y de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
Gracias a la cooperación entre la Guardia Civil y la DGST marroquí, los investigadores localizaron a un individuo con intensa actividad en internet. Difundía contenidos vinculados a la estrategia mediática de DAESH, promoviendo la participación descentralizada de seguidores en todo el mundo.
El detenido era un consumidor habitual de material yihadista violento. Los agentes, al reunir indicios sólidos, actuaron para neutralizar una posible amenaza contra la seguridad pública.
Tras su detención, se analizaron las pruebas incautadas y fue puesto a disposición judicial. El juez ordenó su ingreso en prisión.
Además, el miércoles, la Guardia Civil arrestó a un presunto yihadista en la provincia de Burgos. La operación, dirigida desde Madrid, incluyó dos detenciones más en Salamanca y Huelva.
Los registros realizados en cinco domicilios permitieron incautar abundante propaganda del Estado Islámico, así como documentos sobre armas y explosivos.
La Audiencia Nacional asumió el caso y ordenó prisión provisional para los arrestados en Burgos y Huelva. El detenido en Salamanca quedó en libertad con medidas cautelares.
Nicanor Sen, delegado del Gobierno en Castilla y León, confirmó el operativo: «Efectivamente, ha habido una serie de detenciones». Añadió que «se ofrecerán más detalles a medida que avance la investigación», que sigue abierta.