El año 2024 resultó especialmente crítico para la seguridad en las prisiones españolas y 2025 no ha empezado mejor: durante el primer fin de semana, siete funcionarios han resultado heridos en diferentes cárceles del país. Las prisiones de Cataluña destacan como las más conflictivas.
Este miércoles, tres incidentes en las prisiones de Lledoners, Quatre Camins y Puig de les Basses dejaron un saldo de cuatro funcionarios heridos, que se sumaron a los siete afectados del fin de semana anterior.
El sábado, un interno atacó a la jefa de unidad en Puig de les Basses. Ese mismo día, un preso de nacionalidad marroquí provocó un incendio en el centro penitenciario de Ponent y agredió a tres funcionarios que intentaron apagar las llamas, causándoles heridas.
El domingo por la mañana, otro recluso marroquí, que tenía orden de expulsión y seis antecedentes por agresiones a funcionarios, atacó a tres trabajadores penitenciarios. Las agresiones dejaron a los empleados con diversas contusiones y a uno de ellos con un dedo roto.
Durante 2024, los funcionarios de prisiones organizaron varias protestas para exigir mayores medidas de seguridad en su puesto de trabajo. Entre estas manifestaciones, destacó especialmente la realizada tras el asesinato de Nuria, encargada de la cocina de la prisión de Mas d’Enric, ocurrido en marzo del pasado año.