La Policía Nacional detuvo el pasado domingo en Montellano (Sevilla) a un joven de dieciséis años por su relación con el terrorismo yihadista. El detenido, refugiado sirio, llevaba viviendo dos años con su madre y su hermana pequeña en el municipio.
El menor estaba bajo sospecha policial desde hacía semanas y había llamado la atención de los investigadores por su actividad en internet. Montaron un dispositivo con una treintena de agentes de la Comisaría General de Información durante la noche del domingo y la madrugada del lunes. Al observar cómo el chico trasladaba materiales explosivos a una zona abierta, junto al polideportivo, donde habría estado ensayando el ataque, y ante el temor de que pudiera atentar en los próximos días, los agentes decidieron intervenir y proceder a la detención.
Tras la detención, la Policía realizó un registro en la vivienda, donde pudieron hallar a simple vista productos químicos para fabricar explosivos y documentación que confirmaría los planes de cometer el atentado, a pesar de la versión de la madre, que aseguraba no saber nada. Vecinos de la localidad han explicado a Efe que varios padres del centro donde el detenido estudiaba Secundaria estaban preocupados porque el joven habría enviado este domingo un mensaje de WhatsApp a algunos compañeros con el texto «mañana es el gran día». Decidieron no llevarlos a clase ante el temor de que pasara algo en el centro educativo, incluso antes de saber que había sido detenido.
Supuestamente se trataba de una familia integrada. De hecho, la madre del joven, a la que detendrían paralelamente para investigar la existencia de una posible vinculación entre ella y el terrorismo yihadista, abrió un taller de costura popular entre los vecinos.
Y en seis meses ¿a la calle? Es verdad que algo tiene que pasar o acabaremos atropellados por estos alucinados. Cada vez están más adoctrinados y más locos. Que miedo.