Este pasado sábado por la tarde, en un mitin del Partido Republicano de Donald Trump en el estado de Pensilvania, el Servicio Secreto tuvo que evacuar al expresidente tras una serie de disparos realizados por un hombre de 20 años de ese mismo estado llamado Thomas Matthew Crooks, el cual fue abatido momentos después.
En el atentado, un civil y el tirador acabaron falleciendo, y según se informó horas después dos civiles más resultaron heridos de gravedad. En las imágenes del atentado se puede ver al candidato republicano siendo evacuado con el puño en alto y la oreja ensangrentada tras los disparos, momentos después su gabinete de prensa informaba que Trump estaba fuera de peligro.
El mitin transcurrió en el pueblo de Butler, a unos 55 kilómetros de la ciudad de Pittsburgh, donde se pudieron escuchar unos 10 disparos realizados con un rifle semiautomático AR-15 por el tirador, que se encontraba a unos 125 metros de distancia del escenario en el tejado de un edificio, lo que supuso gritos de pánico entre los asistentes. Después el Servicio Secreto pidió a todos los civiles que abandonaran la zona.
El tirador estaba registrado como votante republicano y no tenía antecedentes penales, según los registros judiciales públicos del Estado de Pensilvania, pero también donó 15 dólares al Progressive Turnout Project, un grupo de ideología liberal y cercano al partido demócrata, en 2021. El Servicio Secreto señaló que el tirador era un lobo solitario y niega que haya posibilidades de que se realicen atentados similares.