Un hombre de 40 años, que conducía un coche robado, fue detenido en Villaverde tras una persecución policial de película por este barrio madrileño.
El hombre, que resultó tener más de 60 antecedentes policiales a sus espaldas por robos con violencia, conducía un Seat Ibiza que estaba denunciado como robado y que se buscaba por estar implicado en varios delitos cometidos en Vallecas en los días previos.
La patrulla de la Policía Local que lo detectó le cortó el paso y uno de los agentes se bajó del coche, pidiendo al conductor que se apeara del vehículo. Este, haciendo caso omiso, se dio a la fuga, dando marcha atrás a gran velocidad y golpeando a varios coches que se encontraban estacionados en la calle. El agente efectuó disparos de advertencia a las ruedas del coche para tratar de detenerlo sin conseguirlo, siendo golpeado por el vehículo en su huida.
Tras una persecución a toda velocidad por las calles del barrio y, en ocasiones, en dirección prohibida y golpeando a otros vehículos al saltarse los semáforos, varios indicativos de la Policía Nacional y Local consiguieron cercarle.
Después de chocar frontalmente contra un coche patrulla, el delincuente trató de huir a pie, pero al ser alcanzado por los agentes de policía se resistió al arresto, golpeando a varios de ellos. Dos de ellos tuvieron que ser atendidos por las lesiones sufridas. Además, once coches particulares y diez vehículos policiales resultaron dañados durante la persecución.
El detenido ha sido acusado de robo, tentativa de homicidio, atentado contra la autoridad, lesiones, conducción temeraria, daños y un delito contra la seguridad vial.