martes, diciembre 3, 2024

La máquina del fango

He preferido esperar un tiempo para escribir...

Más de 1.100 detenidos por yihadismo en España desde el 11-M

Esta semana han sido detenidos tres ciudadanos...

China y África: Una relación no tan pulcra

Si bien la cooperación y los acuerdos económicos con China tienen aspectos positivos, también existen aspectos negativos que lastran a los países africanos.

5/5 - 3 votos

El pasado 4 de septiembre se celebró en Pekín el 9º Foro de Cooperación China-África que finalizó el 6 de septiembre. Esta cumbre viene celebrándose desde 2006, donde los jefes de estado africanos se reúnen con las autoridades chinas así como empresarios de ambos lugares.

Según datos oficiales participaron 382 representantes de empresas chinas y 408 de empresas africanas. El presidente chino Xi Jingpin se reunió con sus homólogos africanos.

El comercio y la influencia china en África ha ido creciendo mucho a lo largo de nuestro siglo, mientras que la presencia europea ha ido decayendo frente al gigante asiático en el continente. La Unión Europea sigue siendo el socio principal pero es China el estado que más acuerdos económicos tiene con los países africanos. El comercio con China supone más de  un 20% de los valores comerciales totales, con la Unión Europea actualmente apenas se llega a un 24%

Puntos claves del Foro de Cooperación China-África: Se ha prometido apoyo financiero a los gobiernos africanos de unos 45.000 millones de euros, fomentando también la inversión en África de unos 70.000 millones de yuanes, es decir, 8.900 millones de euros por parte de empresas chinas. Son cifras realmente altas teniendo en cuenta que el PIB de muchos países africanos no llega a estas cifras. También se han prometido programas de ayuda alimentaria, proyectos de construcción de infraestructura, de desarrollo energético y la eliminación de aranceles a 33 países para que puedan exportar más fácilmente a China. 

Los acuerdos alcanzados favorecen a ambas partes, pues los gobiernos africanos lo que buscan es inversión para la construcción de infraestructura y créditos a largo plazo, China busca expandir su mercado y garantizar el suministro de materias primas claves para su desarrollo industrial y tecnológico. En el plano diplomático China se va erigiendo como un actor global, ofreciendo un modelo de cooperación alternativo al de EE.UU y la Unión Europea, atractivo para los gobiernos africanos.

La influencia de China es un hecho, lo que le permite incluso participar en la resolución de disputas internacionales en la región, como la solución pacífica de la disputa entre Níger y Benin que afectaba al cierre del oleoducto gestionado por la Corporación Nacional de Petróleo de China (CNPC). El origen de este conflicto estuvo motivado por acusaciones cruzadas entre ambos países, ya que el gobierno surgido tras el golpe de estado de 2023 en Níger cerró la frontera con Benín debido a las amenazas de invasión de la CEDEAO al país, por lo que Benin cerró su puerto para la exportación de petróleo nigerino, tras lo cual fue escalando la tensión. Finalmente con mediación china, viendo amenazados sus intereses económicos en ambos países medió para dar una salida pacífica a la disputa. 

Si bien la cooperación y los acuerdos económicos con China tienen aspectos positivos, también existen aspectos negativos que lastran a los países africanos.

Pongamos ejemplos.

En Senegal para poder acceder a la pesca industrial se debe tener acuerdos pesqueros con los países extranjeros que van a pescar en sus costas, China no tiene ningún acuerdo con Senegal en esta materia. Lo que hace es asociarse con cómplices nacionales, por lo tanto hay barcos chinos que legalmente constan como senegaleses que pagan la licencia que pagan los pescadores del país. La pesca industrial que practican deja de lado la pesca tradicional senegalesa de la que depende gran parte de la población, y año tras año se va diezmando y empeorando la situación de los pescadores senegaleses que ven en el tráfico humano una alternativa económica, involucrándose en las rutas migratorias a Canarias. Dos problemas se relacionan entre sí, el empeoramiento de la pesca senegalesa y las condiciones de vida de sus trabajadores, y el problema migratorio que satura el archipiélago canario con múltiples consecuencias negativas para España. Cabe mencionar también la responsabilidad que tiene también la Unión Europea en esta cuestión con sus acuerdos de pesca de 2019. El actual presidente de Senegal Bassirou Diomaye Faye parece que va encaminado a tomar medidas para mejorar la situación del sector pesquero.  

Otro ejemplo se aprecia en la acusación recurrente de la dependencia de los países africanos con China para el mantenimiento de infraestructuras debido a que son realizadas con materiales de bajo coste como en el caso de las carreteras, lo que provoca una situación de dependencia para el mantenimiento de las mismas. 

Vamos viendo que no todo es negro o blanco, pero aun queda por ver la cuestión de la deuda. 

Aunque los países más endeudados del mundo no están en África hay que entender que sus deudas generan más complicaciones que en países europeos, a pesar de que la deuda de estos sea mayor. El impacto es mucho más negativo en economías débiles y subdesarrolladas. Para ilustrar un poco la situación la deuda pública del África subsahariana es de 700 mil millones de dólares, y la deuda de Australia es de 688 mil millones de dólares. 

Según datos de 2021 un 40% de la deuda pública y privada del África subsahariana era con China, de la deuda externa total del continente un 11% es con el país oriental. Se aprecia un aumento de esta a lo largo de los años. La mayor parte de la deuda es a largo plazo, el resto de la deuda procede del Banco Mundial, el Banco Africano, el G20 o la Unión Europea entre otros. El sobreendeudamiento o el riesgo de caer en él es una realidad y un lastre para el desarrollo de las naciones. La condonación de parte de la deuda tanto por parte de China como de otros países no soluciona nada, solo es un ligero y superficial alivio. Aunque China pueda parecer el actor más afable en el continente no por ello la deuda, el sobreendeudamiento y su impago deja de tener un impacto negativo.

En Ghana con un 14% de la deuda contraída con China y según el acuerdo el acreedor está autorizado para intervenir en las ganancias de la venta de petróleo, cacao, bauxita y la electricidad para que se pague la deuda, si Ghana no cumple con sus obligaciones financieras. La independencia económica está en peligro, no solo por la intervención del FMI y otros organismos y países, sino de China también. 

Las relaciones entre África y China se van estrechando cada vez más y abarcan múltiples aspectos, la tendencia para el futuro va posicionando al país asiático como un socio preferente. 

 

Víctor Cañas.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Noticias relacionadas

Lo más leído:

Instagram
X (Twitter)
YouTube
WhatsApp