La Policía Nacional ha detenido este viernes a un hombre que, armado con una katana y un cuchillo, ha atacado a un cliente de un bar de Valladolid. Gracias a la intervención del propietario del local en primera instancia y posteriormente de los agentes de la Policía que se personaron en el lugar, no ha habido que lamentar ninguna víctima.
Todo empezó cuando el individuo, tras encararse violentamente con dos hombres que se encontraban en el establecimiento, salió del mismo para regresar poco después armado con una espada japonesa con la que amenazó con atacarlos. El intento de agresión se vio frustrado gracias a que una de las potenciales víctimas pudo defenderse con una silla.
El propietario del bar actuó con rapidez, consiguiendo calmar al agresor, que procedió incluso a entregarle el arma. Sin embargo, inmediatamente el hombre volvió a mostrar una actitud violenta, sacando un cuchillo que ocultaba bajo la ropa y profiriendo amenazas de muerte. Nuevamente, el hostelero tranquilizó al sujeto y pudo quitarle el arma.
Cuando llegó la Policía, a pesar de que la situación parecía controlada, el hombre se mostró muy alterado, profiriendo de nuevo amenazas de muerte en presencia de los agentes. Tras unos minutos de diálogo con el individuo, los agentes consiguieron detenerle de forma pacífica, siendo acusado de un delito de amenazas graves.
Uno de los hombres que fue objeto de la agresión tuvo que ser atendido por un ataque de ansiedad, aunque afortunadamente nadie resultó herido.