Los agricultores siguen con su movilización en Francia. Lo que empezó como protesta ante sacrificio sistemático de ganado por la dermatosis nodular contagiosa, se ha combinado con las nuevas firmas de la UE con el Mercosur.
El tráfico sufre ahora mismo importantes interrupciones en el suroeste (A64, A63, A61, A20, A89). El primer ministro Sébastien Lecornu pidió a sus ministros el martes «una aceleración de la vacunación». Se reunirá esta semana con las diversas organizaciones profesionales agrícolas.
En la A63 en dirección a Burdeos, las autoridades están implementando medidas de gestión del tráfico fronterizo en el peaje de los Pirineos Atlánticos.
También se han visto afectados tras viajes en tren. En Occitania, el servicio ferroviario está interrumpido en la línea Toulouse-Narbona. Se ha instalado maquinaria agrícola en las vías al sureste de Toulouse.
Pero el foco ahora está en el Mercosur y en sus acuerdos con la UE. De ahí que Bruselas sea el destino no ya de los camines de ganado, sino de los tractores de los agricultores europeos.
Este tipo de protestas no son nuevas. Cada cierto tiempo, los trabajadores agrarios y ganaderos de nuestro continente se movilizan para visibilizar la situación de indefensión e incluso de trato desleal que la propia UE les inflige en beneficio de países externos. Los críticos advierten que los pactos que va a firmar Europa debilitan al sector agrícola europeo.
El centro de la cuestión es la desigualdad en las condiciones de competir en el mercado. Porque las reglas en Europa son desigualdad lejos más estrictas y costosas que las que la UE impone a los países del Mercosur para exportar sus productos a los países del eurogrupo.
“si importamos carne, y productos de países donde no respetan las mismas reglas, no es un juego justo», explica un agricultor en Bruselas.
«Tenemos muchas reglas que respetar y ellos no las respetan, y aun así (la UE) está dispuesta a importar más», afirmó.
Mientras, la policía belga emplea gases lacrimógenos y cañones de agua contra miles de agricultores en Bruselas. Y simultáneamente, los líderes europeos se reunían para debatir sobre el pacto con Sudamérica.
Marta
