La Policía Nacional ha detenido a un estudiante americano, que cursaba sus estudios en la Universidad de Valencia, acusado de cuatro delitos de agresión sexual, dos de ellos con penetración.
Según relataron las víctimas -de 18, 19, 23 y 26 años-, en un primer momento no denunciaron los hechos por vergüenza. Sin embargo, al conocer que existían más casos, finalmente decidieron contar lo ocurrido a la dirección del campus. El joven acusado ha negado los hechos, aduciendo que se trató de relaciones consentidas, algo que las víctimas desmienten.
Una de ellas asegura que se encontraba en estado de embriaguez y que, de no haberlo estado, nunca hubiera consentido. Además, según relata la mujer, el estudiante obró con violencia, provocándole moretones en los brazos.
Otra de las víctimas también hizo referencia al comportamiento violento del acusado. En aquella ocasión, al negarse la mujer a tener sexo con él, la arrojó con fuerza sobre la cama y le sujetó las muñecas para poder abusar de ella. Una tercera víctima, que padece autismo, ha denunciado que el joven le realizó tocamientos sexuales tras engañarla con la excusa de darle un masaje.
Finalmente, la última víctima, una chica de 19 años, asegura que fue violada aprovechando la confianza tenía con el agresor, a quien consideraba su amigo. Tras la agresión, el joven siguió acosándola, llegando a someterla de nuevo a tocamientos no consentidos en una discoteca en la que coincidieron.
Tras conocerse estas denuncias, el presunto violador fue inmediatamente expulsado de la universidad y puesto a disposición judicial. El hombre ha quedado en libertad con cargos y con una orden de alejamiento hacia sus víctimas.