La Policía Nacional ha abierto una investigación tras recibir la denuncia interpuesta por la madre de un niño de 10 años con discapacidad que habría sufrido una agresión sexual en un campamento de un colegio de verano en Málaga.

La madre sospechó que algo no iba bien al notar que su hijo, al volver del colegio, andaba de forma extraña. Al ser preguntado, se quejó de dolor en el ano, lo que encendió todas las alarmas. El menor relató que alguien había llevado dulces y, mientras los comía, se produjo la agresión que, debido a su discapacidad cognitiva, no supo explicar, pero sí pudo escenificar.

Inmediatamente, el pequeño fue llevado al hospital materno-infantil de Málaga, donde, tras un reconocimiento, se observó dilatación anal y al menos un par de fisuras.

La Policía todavía no ha realizado ninguna detención, pero prosigue la investigación para identificar al responsable y esclarecer los hechos.