En Bélgica, la organización Colectivo para la Inclusión y contra la Islamofobia en Bélgica, conocida por sus siglas en francés como CIIB, está bajo el punto de mira por sus presuntos vínculos con la Hermandad Musulmana. Esta información nace de un informe de los servicios secretos belgas de finales de abril de este año. El informe es confidencial pero fue consultado por el medio La Dernière Heure, que calificó al CIIB de «grupo de presión de tendencia hermanista».
Dicho informe lleva la firma del PFCECT (Capacidad común de evaluación de la amenaza relacionada con el extremismo y el terrorismo), un organismo de cooperación entre distintos servicios de seguridad: policía, inteligencia militar, servicio de inteligencia civil… Según La Dernière Heure, basándose en el informe del PFCECT, el CIIB está «vinculado a los Hermanos Musulmanes debido a antecedentes históricos, al apoyo puntual que recibe y a la narrativa que difunde», a lo que añade que «promueve un discurso inspirado en los Hermanos Musulmanes que sugiere una hostilidad inherente de las sociedades y estados europeos hacia el islam y los musulmanes». Uno de los datos mas destacados del informe es que el CIIB fue fundado por siete individuos, de los cuales uno era de la Hermandad Musulmana y otro era afín a la organización islamista.
Además, el informe del PFCECT califica al CIIB como la rama belga del Colectivo Contra la Islamofobia en Francia (CCIF). Se trata de otro colectivo contra la supuesta islamofobia en Francia. Fue disuelto en 2020 por una decisión administrativa del Ministerio del Interior francés a raíz del atentado islamista que acabó con la vida del profesor Samuel Paty, quien había mostrado caricaturas de Mahoma realizadas por Charlie Hebdo (revista que sufrió un atentado en 2015 por el mismo motivo) en sus clases. El gobierno francés acusó al CCIF de difundir propaganda islamista y se le reprocho haber alimentado la campaña, a través de sus redes sociales y sus organizaciones, contra Samuel Paty, quien únicamente ejercía su derecho a la libertad de expresión. El CIIF mantenía vínculos ideológicos con la Hermandad Musulmana y carecía de transparencia.
Los propios fundadores del CIIB, que en aquel momento se llamaba CCIB (Colectivo Contra la Islamofobia en Bélgica) presentaron a su organización como la homóloga belga del CCIF. Tras la disolución de la organización en Francia el por aquel entonces CCIB cambió su nombre al actual CIIB para tratar de desvincularse con una organización vinculada a la Hermandad Musulmana.
Otra investigación del Instituto Thomas More realizada por Fadila Maaroufi y Aymeric de Lamotte afirma que el CIIB recibe cuantiosas subvenciones públicas y privadas. De acuerdo con este estudio durante el periodo 2018-2024 la organización recibió 275.000 euros provenientes de fondos públicos, además de 575.000 dólares provenientes de la Open Society Foundation de George Soros entre 2017 y 2023.
El trabajo de Fadila Maaroufi y Aymeric de Lamotte coincide con el informe de los servicios secretos belgas al declarar la cercanía del CIIB con la Hermandad Musulmana. Citan por ejemplo el caso de Mustafa Chairi, fundador y presidente de la organización hasta 2024, quien aparece en varios vídeos entonando el grito de guerra de la Hermandad Musulmana en Egipto. Otro caso es el de otro fundador, Hajib El Hajjaji, que colaboró durante varios años con la Liga Musulmana Belga, considerada por los cuerpos de seguridad del Estado como la rama belga de la Hermandad Musulmana Internacional.
Pero hay más. En las mismas páginas web de organizaciones de la Hermandad Musulmana en Europa como ENAR (European Network Against Racism) y FEMYSO (Forum of European Muslim Youth and Student Organisations), citan al CIIB como socio.
La convivencia entre organizaciones ligadas a la Hermandad Musulmana y la izquierda en Bélgica es un hecho. De los siete de sus fundadores, cinco son miembros del partido verde Ecolo, como Hajib El Hajjaji, ostentando cargos en el Parlamento de la Federación Valonia-Bruselas y en el Parlamento de Bruselas.
Esto es algo que también ocurre en Francia, donde el libro de Omar Youssef Suleiman, titulado «Les complices du mal» ha puesto sobre la mesa los controvertidos vínculos entre la izquierda y el islam politico en el pais, concretamente con la Hermandad Musulmana.
La Hermandad Musulmana es considerada como una amenaza para la seguridad de las naciones en Europa. Esta organización islamista fue fundada por Hassan Al-Banna en 1928, y busca implantar el Islam Político allá donde se asienta a través de diversas organizaciones.