Este lunes, un cayuco con 23 personas a bordo arribó al puerto de La Restinga, en la isla de El Hierro. La embarcación, que llegó pasado el mediodía, transportaba 21 hombres y dos mujeres, todos en buen estado de salud, según informaron las autoridades locales.
Este episodio se enmarca en el contexto de un incremento significativo de la inmigración irregular hacia España registrado en 2023. Según datos del Ministerio del Interior, el año pasado se contabilizaron 56.852 llegadas irregulares, lo que representa un aumento del 82,1% en comparación con 2022. De estas, 39.910 personas llegaron a las Islas Canarias en 610 embarcaciones, un 154,5% más que el año anterior, consolidando esta ruta como una de las más utilizadas por los migrantes.
Mientras España lidia con el aumento de llegadas, otros países europeos, como Italia, han adoptado medidas más estrictas. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha impulsado una política migratoria centrada en acuerdos con países terceros y centros de detención fuera de su territorio nacional.
Entre las medidas destacan los acuerdos con Túnez y Libia para bloquear las salidas de migrantes y acelerar las devoluciones. Asimismo, en noviembre de 2023, Italia pactó con Albania trasladar a los inmigrantes rescatados en el mar a centros en territorio albanés. Allí deben gestionar las solicitudes de asilo lejos de las fronteras italianas. Estas políticas han resultado en una disminución del 60% en las llegadas a Italia en el primer trimestre de 2024, según datos oficiales.
El incremento de las llegadas a España y las medidas restrictivas en países como Italia reflejan la magnitud del desafío migratorio que enfrenta Europa. La ruta atlántica hacia las Canarias sigue cobrando protagonismo, mientras que las políticas nacionales e internacionales buscan un equilibrio entre la gestión humanitaria y el control de las fronteras.
