Un varón de mediana edad, conocido en Cuenca por protagonizar otros sucesos graves como un ataque con un hacha y un martillo, ha prendido fuego a las puertas de madera del Convento de las Concepcionistas, mientras las monjas franciscanas practicaban el culto matutino. Al huir, un viandante que se encontraba en una panadería ha conseguido reducirlo hasta que ha sido detenido por la Policía.

Los bomberos han llegado rápido al lugar, consiguiendo sofocar un fuego que ocupaba toda la portada barroca del monumento, declarado Bien de Interés Cultural. Por suerte, nadie ha resultado herido, ya que las monjas consiguieron salir de la Iglesia por una puerta trasera. 

Los daños a la iglesia se han dado en el entorno de la puerta, el zaguán y el portón. También ha resultado dañada la bóveda de entrada al templo y algunos de los bancos que se encontraban bajo esta.

Rápidamente el suceso ha llegado a las redes sociales, donde se han formado bulos desde cuentas con intención desinformativa, afirmando que había sido un hombre de procedencia africana y un ataque anticristiano. Desde el periodismo no se puede no combatir estos bulos que no hacen más que daño a las víctimas y a la propia situación que vive España y Europa, donde es necesario frenar la inmigración, analizando el problema desde la realidad, no desde el relato.