El pasado jueves, los Mossos d’Esquadra detuvieron en Barcelona a dos jóvenes magrebíes de 20 años como presuntos autores de una agresión sexual. El ataque tuvo lugar el 3 de enero de este año en las inmediaciones de la Plaza de Cataluña.

La víctima denunció los hechos ese mismo día. Para proteger su identidad, no se han ofrecido datos personales ni circunstancias concretas del caso. La investigación fue asumida por el Área Central de Agresiones Sexuales (ACAS) de los Mossos, especializada en este tipo de delitos.

Ambos detenidos son conocidos por la policía catalana. Acumulan múltiples antecedentes por robos con violencia y hurtos, aunque es la primera vez que se les imputa un delito contra la libertad sexual. Fuentes cercanas a la investigación los describen como delincuentes habituales con un historial delictivo importante.

Tras semanas de trabajo policial, la ACAS logró identificarlos y reunir pruebas suficientes para proceder a su arresto. Los investigadores no han detallado públicamente el tipo de pruebas que han permitido la detención.

Los acusados pasaron el sábado a disposición judicial, pero no se han proporcionado detalles sobre si fueron ingresados en prisión preventiva o puestos en libertad con medidas cautelares.

El caso ha generado preocupación en la zona, especialmente por el perfil reincidente de los detenidos. Los vecinos han pedido más vigilancia en zonas céntricas como la Plaza de Cataluña, donde se concentran gran parte de los delitos nocturnos en la ciudad.